El libro de hoy se lo vamos a dedicar a uno de los pioneros de la arquitectura moderna y gran personaje del siglo XX. Se trata del famoso arquitecto y urbanista Le Courbusier muy influyente por su obras construidas, sus pinturas, diseños y profundo desarrollo teórico en el campo de la arquitectura. Uno de sus grandes aportes fue la búsqueda en encontrar la relación matemática entre las medidas del hombre y la naturaleza, creando así el modular, siendo éste un sistema de medidas antropométrico basado en el hombre como unidad métrica para así crear diseños universales y adaptados a la vida del ser humano.
En el libro de hoy vamos a realizar un recorrido por diferentes obras que aplican los criterios desarrollados por Le Courbusier, vamos a intentar comprender cómo funcionan sus diseños y por qué han sido tan trascendentes en el mundo entero.
¡Comencemos!
La Villa Savoye, construida en 1920 por Le Courbuser, es una de las obras más representativas ya que en esta vivienda unifamiliar se resumen todos los postulados teóricos que más tarde tendrían gran influencia en la historia de la arquitectura. Está ubicada en Poissy, a las afueras de París, y lo primero que sorprende es que fue construida sobre pilotis, columnas esbeltas que sostienen la planta superior de la edificación. Lo significativo de incorporar estos elementos es que se genera una nueva tipología de vivienda que cuenta con una planta libre y una distribución abierta de los espacios. Luego podemos ver la presencia de una fachada libre que se despega de la estructura, lo que permite la aparición de las famosas ventanas corridas en grandes paños vidriados. Por último cabe destacar que en el techo podemos encontrar una terraza verde o cubierta ajardinada que aporta verde a todo la casa y continua la visual con el paisaje circundante.
Al referirnos a los cinco puntos, hablamos de lo que fue la base teórica a partir de la cual se sustenta el discurso y la obra de Le Courbusier marcando el comienzo de la arquitectura moderna. El primero de los enunciados trata sobre el uso de pilotis. Como mencionamos anteriormente son columnas exentas que separan la losa superior del terreno permitiendo la libre circulación en la planta inferior. Sin la necesidad de condicionar la distribución de los espacios ni el diseño de la fachada a causa de una estructura basada en muros, los pilotis permitirán diseñar espacios abiertos, integrados y en relación directa con el paisaje circundante.
Como consecuencia del primer enunciado, se desprende el segundo concepto sobre la planta libre. Es decir, la planta ya no cumple función estructural alguna y esto permite que el espacio no se fragmente a causa de divisiones interiores debido a la presencia de muros portantes. De esta manera surgen nuevas posibilidades compositivas que dan lugar a distribuciones fluidas, abiertas y la experiencia del recorrido se modifica por completo.
Continuamos con el tercer punto en cuestión y como vemos todo se desprende del primero; quitarle la función portante a los muros interiores y exteriores nos permite trabajar la fachada con libertad, sin condicionantes ni restricciones. El foco de la atención está puesto en las verdaderas necesidades y requerimientos espaciales como el ingreso de iluminación natural, la ponderación de las visuales y la aislación y acondicionamiento interior.
Este proyecto es del estudio JPS Atelier Arquitectura.
Gracias a las posibilidades que nos brinda la fachada libre, Le Courbusier propone un diseño de ventanas largas y horizontales permitiendo un gran ingreso de luz natural en el interior de los ambientes. A su vez, las ventanas alargadas enmarcan el paisaje sin obstruir la continuidad en la riqueza visual. Por último el aventanamiento corrido permite aumentar la sensación de amplitud espacial haciendo más ligeros y livianos los cerramientos.
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Llegamos al último de los puntos, la terraza o cubierta jardín hoy en día más conocida como techos verdes. Preocupado por mejorar las condiciones de habitabilidad, Le Courbusier encuentra una solución para proteger las cubiertas contra los cambios de temperatura, mejorar las condiciones interiores y aportar espacio verde tanto para la propia vivienda como para la ciudad. De esta manera incorpora vegetación en los techos y resignifica un espacio que antes parecía olvidado.
La influencia del pensamiento teórico como de la misma obra del gran Le Courbusier ha tenido un gran impacto en la arquitectura de todos los países y de todos los tiempos.
