Transformar, reciclar, renovar, remodelar, rediseñar, convertir, son todos verbos que presuponen acciones, movimientos que generan un cambio positivo.
En el libro de ideas de hoy queremos proponerte acción y movimiento para generar esas transformaciones que nos dan alegría. En este caso, la idea es trabajar sobre nuestra vieja cocina para rejuvenecerla, llenarla de aire fresco y reconvertirla en una con buena onda y practicidad.
Ideas económicas algunas, un poco más onerosas otras pero todas sencillas y alcanzables en cuanto a ejecución.
¿Tenés para tomar nota? ¡A renovarse!
Un cambio más radical propone cambiar parte de los viejos azulejos de la pared por un revestimiento diferente y de gran impacto, agregándole un shock de modernidad casi futurista. El tono metalizado refleja las luces del ambiente creando un efecto fascinante.
Una cocina luminosa pero con los metros contados, a la que le faltaba espacio de apoyo y lugar de trabajo. Un viejo mueble transformado en una cómoda isla fue la solución. Animáte a la intervención creativa con pintura pizarra creando originales anotadores donde dibujar y escribir.
Si tu cocina tiene un diseño parecido al de esta imagen o cuenta con una barra desayunadora podés armar sobre ella, un original y canchero artefacto lumínico. Arriesgáte con cables de distintos grosores y colores y con diferentes tipos de lamparitas para hacer unas lámparas colgantes con mucha onda.
Jugá con los colores y de paso restaurá ese juego de comedor que se ve un poco deslucido y opaco. Animáte a los tonos fuertes y llená tu comedor de energía.
Si te gusta cocinar las especias son infaltables en tu cocina. Y una forma de renovar tu cocina sin gastar mucho es justamente renovar los accesorios o utensilios. Aquí una propuesta que podés hacer vos mismo y que además vestirá la pared de la cocina. Un especiero colorido y con mucha onda: tubos de ensayo de vidrio encastrados en un rectángulo de madera natural.
Otra idea para renovar los viejos azulejos pero sin tener que sacarlos. Una solución e idea de decoración práctica y fácil que le cambiará el espíritu a tu cocina: los vinilos. Son láminas o papeles autoadhesivos, fáciles de colocar, prácticos de limpiar y con infinita variedad de colores y diseños que podés pegar sobre casi cualquier revestimiento.
Una idea de renovación mutante ya que la pintura pizarra te da la posibilidad de cambiar la decoración todas las veces que anotes o dibujes algo sobre ella. ¡Viva la creatividad y el cambio!
Si en tu cocina no tenés una barra desayunadora podés agregar una siguiendo el paso a paso de este libro de ideas.
Si contás con una isla, podés agragarle una extensión ampliando sus funciones y renovando tu cocina.